lunes, 30 de julio de 2012

Día +46: Siguiente parada

Sí, lo sé, lo sé, este blog parecía más muerto que la conciencia de un político. Pero realmente no tenía nada relevante que contar. Seguía con mis purés, mis potitos y mis cosas. Hasta hoy.

Esta mañana, revisión con el endocrino. Al pesarme, 114,900 Kg. Vamos por 14, lo cual, como dice él, es incluso demasiado para un mes y medio. Pero bueno, ahora estoy perdiendo 500-1000 g. por semana, que es un buen ritmo. Al fin y al cabo, si quería adelgazar en quince días, en vez de en un quirófano debería haberme metido en un tren camino a Lourdes.

Hemos revisado las recomendaciones dietéticas y me han dado permiso oficial para empezar con la dieta blanda. Ahora ya puedo comer tortillas, carne magra muy blandita... De momento sigo sin poder pasarme con la fibra, así que las ensaladas que tan bien me vendrían este verano tendrán que esperar. Pero poder comer algo que se pueda masticar como Dios manda... ¡Qué ganas! Eso sí, de masticar me voy a hartar, porque una de las recomendaciones dietéticas que te dan es que tragues la comida como si la hubieses pasado por la batidora. Pero bueno. el estómago quizá no lo note, pero los dientes... ¡Ya te digo!

Aún no sé cuándo podré volver a trabajar. El endocrino no se ha querido mojar con el tema, me ha dicho que unos dos meses es el tiempo habitual para este tipo de intervenciones, pero que él no puede decidirlo. Vamos, que mañana decida mi médico de cabecera. O su residente. O su sustituto. Que ahora en julio-agosto no sé lo que puedo encontrarme en su consulta.

En fin, mañana os cuento. De momento, sólo digo una cosa. ¡Puedo tomar café! descafeinado, pero, eh, al menos engaño al cerebro. ¡Yuju!

PS: Ah, no os lo perdáis. Al final al endocrino no le han gustado las vitaminas que tomo y me ha mandado una tercera marca. Espero poder encontrarla esta vez. Toco madera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario